lunes, 24 de octubre de 2011

NOVIAS A LA CABEZA. Parte III.

SOMBREROS


Concepto. Como ya mencioné la semana pasada, un sombrero es un tocado, que consta de tres partes: copa, ala y una banda interna que protege la cabeza del propio sombrero. Se inventó para protegerse del sol y defenderse del frío. Su apogeo llegó con el Renacimiento y desde entonces hasta pasados los años 70 del siglo XX fueron de uso cotidiano. A partir de la década de los 80 del siglo pasado caen en desuso hasta la actualidad en que la moda los está resucitando en todas sus versiones.

Pamelas clásica / de plato
Tipos. Si de enumerar se tratase, podríamos elaborar una larga lista de sombreros, pero sólo nos fijaremos en aquellos que sean más aconsejables para un día B y del agrado de las novias. Para establecer un orden distinguiremos entre sombreros para la ciudad -más “serios”- y sombreros para una boda en el campo o la playa -más informales-. Para la ciudad son muy adecuados: la pamela, el cloché, cierto tipo de capelinas, el canotier, el bombín y los sombreros de copa. Para el campo puedes optar por: la capelina, el canotier más básico, la chalana y el fedora.
Leticia Blanco de {LOVE NOTES} el día de su boda
Encontramos dos tipos de pamelas, a saber, la clásica, de ala ancha y cuya altura de copa es variable y la de plato, cuya copa es prácticamente plana. Para las primeras podemos optar por lucir la melena suelta o un moño bajo, dependiendo también del juego que nos ofrezca la copa; para las segundas tu moño será bajo. La pamela nunca excederá la anchura de tus hombros.

Mariló Mascuñán de Cómo vestimos
el día de su boda
El cloché es un sombrero con forma de cilindro, copa profunda y ala muy corta o visera. Resulta óptimo para cortes a lo garçon o melenas cortas, como las que lucían las mujeres de los años 20, que fue cuando nació, aunque, si tienes el cabello largo, también podrías llevarlo con una coleta o moños muy bajos. El cloché se puede destacar acompañado de un velo del que tras la ceremonia, obviamente religiosa, te puedas desprender.
La capelina es similar a la pamela clásica, pero con las peculiaridades de que tiene la copa baja y un ala muy ancha que cae alrededor de la cabeza realizando ondulaciones. Para vestirla en la ciudad, lo harás con moño bajo, en cambio, en una boda campestre o de playa puedes permitirte el cabello suelto y una capelina de tejido con mayor caída, sin importar que caiga algo más sobre el rostro, aunque no demasiado, pues recuerda que es importante que la faz de la novia pueda ser vista sin grandes impedimentos.
Charlene de Mónaco con capelina
Canotier de Mar & Malizia
Bombín claro
El canotier tiene sus orígenes en los navegantes italianos y es un sombrero de paja con una cinta alrededor de la zona baja de la copa y fue resucitado por Coco Chanel poco antes de la I Guerra Mundial. Por su sencillez se puede utilizar en bodas de campo o playa. La evolución del canotier se ha sofisticado mucho con velos de plumetti, lazos de gross grain en la cinta primigenia, plumas... Esta versión es más adecuada para ciudad. Lo correcto será lucirlo con un moño bajo, a no ser que tengas el cabello corto o tipo melenita. En entornos más informales la melena puede quedar bien.
El bombín es un sombrero hongo, semiesférico y de ala corta y dura. Sólo es apto para entornos urbanos o de campo muy distinguidos. El peinado propio es un moño bajo u ocultar el cabello pajo la copa.
El sombrero de copa o “top hat”, aunque es de uso más propio para los caballeros, también se ha extendido en su versión femenina, quizá con la copa menos alta. Se distingue precisamente por su copa elevada y su ala estrecha y dura. Este es el único sombrero que permite un recogido o semirecogido elevado.
Chalana / Sombrero de copa
La chalana hunde sus raíces en una  época tan creativa como lo fue la del Romanticismo. Es un sombrero de paja son una copa pequeña y un ala muy ancha que se ata con una gran cinta al cuello. Resultará muy original si te casas en el campo y admite tanto melenas sueltas como semirecogidas o moños.
Fedora
El fedora o también conocido como sombrero de tres picos por su forma, tiene una hendidura en el centro de la copa, lo que produce el efecto de los picos mencionados, su ala es corta y, en principio, es de fieltro. Se aconseja para bodas de invierno en zonas de campo.

Cómo llevarlos. Los sombreros son para el día. Si tu enlace es más allá de las 19:00 horas o se prolongará con una cena, no puedes lucir nada que tenga ala: Carece totalmente de sentido. Es de suma importacia que tengas en cuenta tu altura a la hora de decantarte por un tipo de sonbrero u otro. Si eres alta puedes permitirte un ala muy ancha y puedes arriesgar con todo tipo de copas, mientras que si si tu estatura es media o más bien baja, te recomiendo uno de ala corta y copa media o alta. Naturalidad ante todo. No se ladea la cabeza, no se agarra el sombrero con la mano, por lo que habrá de estar bien sujeto, se camina de la misma manera que si no lo llevaras -erguida y sin que parezca que llevas nada en la cabeza.
Mis abuelos paternos el día de su boda
No se quita ni para saludar -darás la mano- ni en la mesa a la hora del convite, aunque has de ser prudente a la hora de escoger sus medidas, porque tampoco debe molestar. Si decides llevar levantado uno de los lados del ala del sombrero será el izquierdo, puesto que a ese lado te oferecerá el brazo el novio. Al igual que cualquier otro tocado, un sombrero admite velo si los esponsales son canónicos, aunque se dasaconseja la pamela.  Los velos con todo tipo de tocados grandes eran muy frecuentes en las novias de las décadas que abarcan de los años 30 a los 50. Si quieres saber más sobre estos periodos de la moda pincha aquí

LO QUE NUNCA DEBES HACER

1. Utilizar un sombrero de noche. Sólo se permiten hasta las 19:00 horas.
2. Desprenderte del sombrero.
3. Llevar un sombrero demasiado extravagante.
4. Lucir cualquier tipo de velo o recordatorio del mismo en un anlace civil.
5. Si no estás acostumbrada, ponerte uno el día de tu boda.

Entre velos , tocados y sombreros a elegir y...
¡a disfrutar!